Llegó 5G... ¿Y ahora?

12 de Febrero de 2021
La opinión de Enrique Carrier sobre la inauguración de 5G en la Argentina por parte de 10 antes de Personal

Artículo publicado por Enrique Carrier en Comentarios.info.

El último fin de semana, sin mucha pompa ni celebraciones, Personal anunció la disponibilidad de 5G en la Argentina, poniendo en funcionamiento 10 antenas en las ciudades de Buenos Aires y Rosario. Se trata del primer paso en el desarrollo de 5G en el país, un camino largo y del cual resta todavía mucho por recorrer.

No faltó quién se preguntase cómo esto era posible si no hubo por el momento ninguna asignación de espectro para 5G. Es más, ni siquiera se sabe aún cuáles serán las bandas que se utilizarán, mucho menos los plazos en los que se asignarán. La magia está en el uso de la tecnología DSS (Dynamic Spectrum Sharing o Compartición Dinámica de Espectro). La misma permite la coexistencia de 4G y 5G, compartiendo las mismas frecuencias dinámicamente y bajo demanda (en este caso, usando las bandas de 2,6 GHz y 700 MHz). Para esto es necesario que tanto las radiobases como los terminales sean compatibles con esta tecnología. Lo que logra el DSS es hacer un refarming de hecho de la noche a la mañana, evitando el largo proceso que implicaría hacerlo de la manera tradicional: liberar totalmente una frecuencia antes de comenzar a utilizarla con otra tecnología.

Al montarse sobre la red 4G, esta versión de 5G tiene algunas limitantes en cuanto a velocidad, capacidad y latencia en comparación con una red 5G totalmente independiente. No obstante, permite despliegues iniciales eficientes de 5G, ya que además del espectro asignado, se utilizan otros elementos de la red, como las antenas y radiobases. De hecho, esta tecnología se está utilizando en varios países como EE.UU., Alemania, España, Francia, Italia, Reino Unido, Suiza, Canadá, Taiwán, Rusia y varios más. Siempre teniendo en claro que no se trata de la 5G definitiva pero sí que es el comienzo de su desarrollo hasta llegar a una red 5G totalmente independiente de 4G, lo que potenciará sus características distintivas.

Por el momento, son pocos los smartphones compatibles disponibles en Argentina. Entre éstos se encuentra los Motorola Edge y Razr, el Samsung S21, el iPhone 12. Igualmente, éstos deben ser homologados por el Enacom para luego recibir una actualización de software, cosa que se estima suceda en breve. Lógicamente, es de esperar que a partir de ahora se multipliquen los lanzamientos de equipos que soporten 5G.

Como sucede siempre que se lanza una nueva generación, la cobertura es muy acotada. En CABA es en el centro, en zonas aledañas al Teatro Colón, mientras que en Rosario es en los alrededores del Monumento a la Bandera. Así como ocurrió con las generaciones anteriores, 5G se irá desplegando paulatinamente y por oleadas, lo que le permitirá ganar capacidad y cobertura. Y en el ínterin, se irá produciendo el necesario recambio de terminales (que se ralentizó mucho en los últimos años, en los que las ventas cayeron fuertemente) así como la maduración de nuevos dispositivos, aplicaciones y casos de uso. Un proceso que sin dudas llevará algunos años.

El anuncio llamó la atención por lo inesperado, más aún en momentos de tensión, con medidas judiciales incluidas, entre los prestadores TIC y el gobierno luego de la declaración de aquellos como servicio público (incluyendo a las comunicaciones móviles) y la autorización de actualizaciones de precios por debajo de la inflación desde que comenzó su congelamiento [Ver: “Precios asimétricos”]. Pero a su vez puede ser visto como una carta de negociación, poniendo en evidencia las inversiones que hay por delante si se quiere mantener una infraestructura moderna y actualizada. También, buscada o no, es una presión para que el gobierno avance con la planificación de la asignación de nuevas bandas, previendo las necesidades de 5G, así como los límites en la capacidad de 4G, de forma tal de no repetir lo que pasó en su momento en el país con la saturación de 3G.

Un dato final no destacado: el acortamiento de la demora en la llegada de una nueva generación. Mientras que la tecnología 4G tardó 5 años en llegar a Argentina, luego de su lanzamiento comercial inicial en Suecia (en diciembre de 2009), la tecnología 5G llegó a menos de 2 años de su lanzamiento en Corea del Sur (en abril del 2019). La diferencia esta vez fue que hubo una tecnología de transición como DSS, lo que hizo que no fuera necesario esperar a que el Estado ponga en juego nuevas porciones de espectro.

(*) Enrique Carrier: Analista de mercado especializado en Internet, informática y telecomunicaciones, con más de 20 años de experiencia en el sector tecnológico. Además, es el editor de “Comentarios”, el newsletter semanal y blog de Carrier y Asociados