La tercera ola: cómo la IA puede transformar los sistemas de gestión de video

9 de Abril de 2024
Escribe João Paulo Florentino de Sousa, VP de Ventas y Operaciones CALA de Irisity

El creciente interés en inteligencia artificial en el sector de seguridad física puede significar que los actuales Sistemas de Gestión de Vídeo (VMS) pronto se volverán obsoletos debido a la llegada de sistemas basados en capacidades de inteligencia analítica de alta velocidad, con las cuales la capacidad humana no puede competir. Esto se debe a que los sistemas tradicionales de vigilancia por video graban y proporcionan imágenes, pero no aportan inteligencia a las operaciones de seguridad.

Sin embargo, la combinación de ambos mundos puede aumentar el interés en una solución que prevenga y resuelva problemas de protección. Esto se debe a que, una vez resuelto el problema de la infraestructura para capturar y acceder a imágenes, los usuarios tienden a enfocarse en extraer valor y resolver problemas de seguridad y operacionales. Después de la migración del video a IP y el advenimiento de sistemas efectivos de gestión de video, hace que el análisis de video potenciado por la inteligencia artificial se convierta en la tercera ola en gestión de video.

Aprovechando el machine learning, los algoritmos y la visión computacional, los sistemas de defensa con IA convierten las imágenes en datos para aportar inteligencia a los mecanismos de video y apoyar a los organismos de seguridad pública. También es posible, a través de las imágenes generadas, utilizar el propio sistema para aumentar el nivel de precisión de los análisis; básicamente, la IA entrena a la IA para que el contenido de video sea procesado e interpretado con eficiencia, permitiendo la detección de amenazas en tiempo real.

Estos sistemas inteligentes están listos para convertirse en el estándar del mercado, ofreciendo soluciones que minimizan los desafíos cotidianos de los agentes y aumentan la seguridad general tanto en el sector público como en el privado. A partir de situaciones reales, como los movimientos que realiza un asaltante antes de abordar a una víctima, se pueden capturar en diversas situaciones y así se crean algoritmos que entienden el patrón como una situación de peligro. La IA requerirá que los integradores y ejecutivos de seguridad se involucren más con el sector en el que operan los usuarios finales, centrándose en el desarrollo personalizado de estas tecnologías según el desafío de cada región y segmento.

Para mejorar la conciencia situacional y agilizar la toma de decisiones, es fundamental la integración inteligente de las cámaras, que pueden conectarse a la nube y a los teléfonos inteligentes para transmitir imágenes en tiempo real y reducir el tiempo de respuesta a un incidente. El VMS actual evolucionará hacia un sistema alimentado por IA, lo que podríamos llamar DVMS (Data Video Management System). Si una industria o un sitio de construcción necesita garantizar el uso de EPIs, el análisis de video y las alertas de IA para la detección de cascos/equipos de protección son más precisos y requieren menos tiempo que las verificaciones manuales. Esto brinda a la empresa la capacidad de cumplir con las normas de seguridad.

Para que el concepto de DVMS sea adoptado como estándar y aplicado a la mayoría de los sistemas de monitoreo, es necesario que exista una alta precisión de detección en la plataforma de video analítico, una detección que actualmente no está garantizada por los análisis gratuitos existentes en las cámaras o los sistemas de gestión actuales. Un sistema con alta precisión de detección elimina la necesidad de grabar y monitorear todo, facilitando la toma de acción inmediata y la búsqueda de imágenes. Las investigaciones son muchas veces esenciales, pero llevan tiempo y ya no tienen el mismo efecto contundente que una alerta en tiempo real, que puede evitar delitos y salvar vidas, además de ahorrar recursos en infraestructura de grabación y visualización.

En cuanto a la compatibilidad, es fundamental que la tecnología aplicada sea agnóstica, es decir, que pueda operar en cualquier proyecto de videovigilancia en entornos IP, compatible con cualquier marca de cámaras o incluso en sistemas de gestión de video. Después de todo, ya sea en seguridad pública o privada, es importante aprovechar las inversiones significativas realizadas en cámaras, por ejemplo, el enfoque es llevar inteligencia y agilidad a las operaciones de seguridad cotidianas.

Con esto, las organizaciones pueden centrarse en lo que importa y cuando importa, (see what matters when it matters), ahorrando tiempo y esfuerzo de los agentes, optimizando las operaciones y reduciendo los costos dedicados al hardware de grabación. Con la solución, el monitoreo de video se vuelve más efectivo y la cobertura y alcance de toda la solución pueden ser mayores, al igual que el retorno esperado.

El video es una excelente herramienta para disuadir delitos y reducir los índices de violencia, pero para obtener resultados significativos, es fundamental que el proceso de monitoreo, análisis y alertas sea inteligente.

(*) João Paulo Florentino de Sousa: VP de Ventas y Operaciones CALA de Irisity